No podemos dejar de contar lo que hemos visto y oído (…), toda la gente alababa a Dios por lo que había ocurrido (cf. Hch 4, 20)
No podemos dejar de contar lo que hemos visto y oído (…), toda la gente alababa a Dios por lo que había ocurrido (cf. Hch 4, 20)