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Verónica Reynoso López

Nací el 1 de noviembre de 1965 y me consagré el 15 de agosto de 1989.

Soy de Irapuato Gto., donde conocí el Movimiento a los 18 años en el grupo de chicas de Reino que las señoras reunieron como primer apostolado. En mi familia mis tres hermanas y yo en cuanto conocimos el Regnum Christi, compartimos la misma llamada de conocer, amar y servir a Cristo y a la extensión de su Reino. Mis padres siempre nos apoyaron aunque no han formado parte del Movimiento, pero su apoyo incondicional sobre todo a mi vocación consagrada me ha acompañado siempre como un gran regalo de Dios.

En mi recorrido apostólico he estado en Roma durante mis años de formación. Mi primer apostolado fue en los Estados Unidos en las giras y posteriormente de formadora del Centro Estudiantil y de Formación. Después de un breve tiempo en Teotepec, fui destinada a Irlanda, donde pude trabajar apostólicamente en la Academia y en la sección. De ahí fui a la Ciudad de México a trabajar con las colaboradoras y en la sección de Reino. Mi siguiente destino apostólico fue Jerusalén.

Llegué a Monterrey en el 2012. Actualmente estoy en la comunidad de Santa Engracia. Somos 15 consagradas y una colaboradora, comunidad joven, con mucho empuje apostólico, vibran por el Movimiento y por ser parte de esta etapa que nos está tocando vivir. Tienen un fuerte sentido de misión y una conciencia clara y profunda de su pertenencia a Cristo.

Tengo la certeza que Dios Nuestro Señor nos iluminará en esta Asamblea para ver con claridad el camino por el que quiere que sigamos caminando. Por lo que, les  pediría a todas mis hermanas consagradas  oraciones para que nuestra actitud durante este tiempo, sea la del apóstol Juan, que reclinado en el pecho de su Maestro, sabía lo que el Corazón de Jesús quería. Que puestas a Su escucha podamos distinguir cuáles actitudes del corazón debemos despertar para que en todo momento se realice Su Plan para la Gloria de Dios.


I am Verónica Reynoso López.  I was born on November 1, 1965 and was consecrated on August 15, 1989.

I am from Irapuato, Mexico.  That is where I first knew about the Movement when I was 18 years old.   Some Regnum Christi members gathered together a group of girls as their first apostolate.  As soon as my three sisters and I knew about Regnum Christi, we shared the same call to know, love and serve Christ and to extend his Kingdom.  My parents have always supported us, even though they are not members of the Movement.  Their unconditional support, above all in my vocation as a consecrated woman, has always accompanied me as a great gift from God.

I was in Rome for my years of formation.  My first apostolate was in the United States, first on road teams then as a formator in the pre-candidacy and formation center.  After a brief time in Teotepec, Mexico, I went to Ireland where I worked in the academy and the Regnum Christi section.  From there, I went to Mexico City to work with the Regnum Christi missionaries and in the Regnum Christi section.  My next apostolate was in Jerusalem.

I arrived to Monterrey, Mexico in 2012.  I am currently in the community of Santa Engracia.  We are 15 consecrated women, one Regnum Christi missionary and one young woman who is living with us and discerning her vocation.  We have a lot of   apostolic drive, and we vibrate with the Movement as we recognize the importance of living during this special time.  The community has a strong sense of mission and a clear and profound awareness of their belonging to Christ.

I am certain that God will enlighten us in this Assembly so as to be able to see clearly the way he wants us to continue walking.  I ask all of my consecrated sisters for prayers so that our attitude during this time may be that of the apostle John who reclined on the chest of his Master, knowing what Jesus’ Heart wanted.  Listening to Him, we can distinguish which attitudes of the heart we must awaken so that His Plan for God’s Glory can be realized at all times.

 


Para completar el proceso de adopción espiritual de este delegado sigue las siguientes instrucciones
  1. Ingresa tu nombre y correo electrónico
  2. Haz Clic en el botón “Adopta un delegado”
  3. Una vez que tengas asignado un delegado puedes tenerlo presente en tus oraciones diarias, ofrecer una decena del Rosario por él o ella, rezar la oración por los frutos del proceso de renovación pidiendo al Espíritu Santo que le ilumine, hacer sacrificios y obras de misericordia en su nombre.